{"id":310,"date":"2021-01-24T08:56:40","date_gmt":"2021-01-24T14:56:40","guid":{"rendered":"http:\/\/orlycortes.com\/?p=310"},"modified":"2023-04-04T11:18:43","modified_gmt":"2023-04-04T17:18:43","slug":"melodia-para-no-perder-la-razon","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/orlycortes.com\/melodia-para-no-perder-la-razon\/","title":{"rendered":"Melod\u00eda para no perder la raz\u00f3n"},"content":{"rendered":"\n

La avenida est\u00e1 colmada de acero. Nadie cede el paso y quienes vamos a pie, automovilistas y ciclistas efervecemos en el asfalto. Se oye una sirena a lo lejos. El sonido no tarda en hacer vibrar el t\u00edmpano y los coches buscan r\u00e1pidamente c\u00f3mo abrir camino. Contenemos el aliento al un\u00edsono hasta que el ruido se desvanece. Es una escena com\u00fan que a m\u00ed, personalmente, no deja de sorprenderme.<\/em><\/strong><\/p>\n\n\n\n

Hay sonidos que pintan a la Ciudad de M\u00e9xico: organilleros, el coche de los camotes, los tamales oaxaque\u00f1os, la ni\u00f1a cansada de los fierros viejos, la campana de la basura y desde hace unos meses, las sirenas cada vez m\u00e1s constantes, siempre en el fondo, siempre golpeando un poco el coraz\u00f3n. <\/p>\n\n\n\n

Cuando, en 1819, Charles Cagniard de la Tour nombr\u00f3 este aparato lo hizo pensando en los seres m\u00edticos griegos \u2013mitad mujeres y mitad animal\u2013 quienes pose\u00edan un canto que embrujaba a los navegantes hasta conducirlos a la muerte. Hoy en d\u00eda, sus hom\u00f3nimos de metal, pl\u00e1stico y sonido estridente, hacen precisamente lo contrario. Inicialmente, las sirenas ten\u00edan cuerpo de ave con rostro y torso de mujer; no es sino hasta la \u00e9poca medieval que su parte inferior es figurada como un pez. <\/p>\n\n\n\n

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La imagen de sirenas aladas me parece hermosa porque sobre las calzadas capitalinas s\u00f3lo hay dos formas de abrirse paso: volar \u2013si es que alguna vez logramos hacerle caso al cotidiano \u201csi tienes prisa, br\u00edncame\u201d\u2013 o ser ambulancia. <\/p>\n<\/div><\/div>\n\n\n\n

Adem\u00e1s, una hip\u00f3tesis del origen de la palabra es que \u03a3\u03b5\u03b9\u03c1\u03ae\u03bd (seir\u00e9n) quiz\u00e1 signific\u00f3 \u00abcuerda\u00bb, haciendo referencia a seres que ataban \u2013o encadenaban\u2013 y desataban, de acuerdo con su voluntad. As\u00ed. las imagino tensando y aflojando los hilos de nuestras calles para inventar caminos entre la marabunta de autos. <\/p>\n\n\n\n

Hablando con una amiga, le preguntaba si \u2013guardando toda proporci\u00f3n\u2013 el sentimiento indescriptible de alarma y dolor que me acompa\u00f1a desde que inici\u00f3 la pandemia ser\u00e1 algo similar a lo que experimentan las personas en una zona de guerra. Todo el tiempo espero el momento en el que m\u00e1s bombas caer\u00e1n, invariablemente m\u00e1s pr\u00f3ximas. Se escuchan \u201dlas explosiones\u201d lejos y cerca, siempre constantes. <\/p>\n\n\n\n

Y en el fondo, las sirenas.<\/strong><\/p>\n\n\n\n

\u00bfEn serio contin\u00faa mi admiraci\u00f3n por la escena tan ordinaria con la cual comenc\u00e9 este texto? S\u00ed, porque el aire falta en esta ciudad desde hace muchas d\u00e9cadas y ahora que nuestros pulmones colapsan uno a uno frente al covid, unos cuantos inflan su cuenta bancaria a costa del sufrimiento. Efectivamente, hemos visto personas darlo todo por estar al frente de la contingencia, pero tambi\u00e9n hay \u2013yo los he percibido m\u00e1s en semanas recientes\u2013 quienes cometen los peores atropellos en medio de la tragedia. Los tanques y condensadores de ox\u00edgeno se est\u00e1n vendiendo hasta en cinco veces su precio original. Familias completas son defraudadas al pagar adelantos por fuentes de ox\u00edgeno inexistentes. Y todo tiene que ver con que las leyes mexicanas son una sugerencia, aplicable exclusivamente a quien no pueda pagar por romperlas. <\/p>\n\n\n\n

Y as\u00ed, con todo, las sirenas se siguen abriendo el paso entre la multitud met\u00e1lica que en ninguna otra circunstancia, ceder\u00eda su lugar al frente de la fila a nadie.<\/strong><\/p>\n\n\n\n

Me sigue sorprendiendo porque pienso que si ma\u00f1ana desaparecen todas las leyes, la gente seguir\u00eda abriendo el paso a las ambulancias. Y lo creo as\u00ed porque en este lugar, donde las consecuencias son arbitrarias, nos aferramos a sobrevivir: porque supe de la organizaci\u00f3n despu\u00e9s del sismo de 1985 y atestig\u00fce las redes comunitarias en plena funci\u00f3n en el 2017. En momentos as\u00ed, esta ciudad, entre sus grietas metaf\u00f3ricas y reales, muestra que lo nuestro, lo verdaderamente nuestro es la anarqu\u00eda<\/strong> y que si seguimos aqu\u00ed, de pie, es gracias a ella. El Estado nos ha fallado una y otra vez y es la regulaci\u00f3n que nace de la ciudadan\u00eda, ese sabernos un pueblo \u201chu\u00e9rfano\u201d \u2013nuestra anarqu\u00eda\u2013 la que nos ha hecho persistir.<\/strong><\/p>\n\n\n\n

En la pel\u00edcula Another Earth <\/em>(2011), la protagonista cuenta la historia de un cosmonauta que no logra escapar de un ruido persistente y fastidioso dentro de su nave. Piensa que le esperan muchos d\u00edas en soledad con ese sonido y para no perder la raz\u00f3n, decide \u201cenamorarse\u201d de \u00e9l. Entonces, ya no escucha un \u201cclack\u201d, \u201cclack\u201d sino que oye m\u00fasica. De la misma manera, creo que pensar\u00e9 en las sirenas de las ambulancias como el himno de la anarqu\u00eda que mantiene esta ciudad suspendida encima de un eterno abismo, pero evitando que caiga al fondo. <\/strong><\/p>\n\n\n\n

Cuando vea las peleas eternas en la redes sociales \u2013esas donde insistimos en doblar verdades para apoyar u odiar a un partido y articulamos falsedades para poner la pandemia al servicio de nuestra ideolog\u00eda pol\u00edtica\u2013 o cuando en la pantalla aparezca la siguiente noticia de lo peor de la humanidad que ha salido con la crisis sanitaria, podr\u00e9 escuchar en el fondo las sirenas y pensar que, al menos, a unos metros de distancia, se est\u00e1 desarrollando esa escena cotidiana que me sigue asombrando, en la que los autom\u00f3viles abren el paso a las ambulancias.<\/p>\n\n\n\n

Es una secuencia de eventos en la que por un breve instante logramos que la vida humana sea lo m\u00e1s importante.<\/strong><\/p>\n\n\n\n

Es una melod\u00eda.<\/strong><\/p>\n\n\n\n

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*La imagen es de un dibujito m\u00edo.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

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